viernes, 23 de julio de 2010

REPORTE DE LECTURA

Nombre: Cesia Velázquez Vergara
Materia: Dinámica Grupal Pedagógica
Nombre de profesor(a): Lic. Ericka Aracely García González
Lectura: La influencia de las malas compañías, Capitulo 29.
Bibliografía: Consejo para los maestros, padres y alumnos, Elena G. de White, México: Gama Editores, c2005. pág. 125-128.
Fecha: 13 de julio de 2010

“La elección de compañías es un asunto que los estudiantes deben aprender a considerar seriamente”.
Como jóvenes en la actualidad nos gusta socializar, conocer e interactuar con el mundo. Dios creó a Eva con el fin de que el hombre no estuviera solo, por ende tenemos la certeza de que Dios es feliz cuando sus hijos forman grupos para socializar, aprender, desarrollar confianza, unidad, liderazgo, etc. Sin embargo el también nos aconseja hacerlo de manera que los principios ya dejados por el los llevemos a la práctica.

En proverbios podemos encontrar una gama de consejos, desde cómo tratar a los padres hasta como elegir nuestras amistades, ya que estas son un papel importante en la vida de todo joven o adolecente. Las amistades que se eligen marcan la pauta de nuestras vidas, ya sean buenas o malas.

Todo joven que se arraiga a la palabra divina tiene como fin el éxito, podrán venir pruebas difíciles, ser inducido al mal pero este preferirá la justicia y el temor a Dios. Mas lo que aparentan tener frutos y no las llevan serán arrastrados fácilmente por corrientes de agua sucia. “Hijo mío, no te olvides de mis enseñanzas; más bien, guarda en tu corazón mis mandamientos. Porque prolongarán tu vida muchos años y te traerán prosperidad” (Proverbios 3:1-2).

“La verdadera grandeza y nobleza del hombre se mide por su poder de subyugar sus sentimientos, y no por el poder que tienen sus sentimientos de subyugarle a él”.
Como seres humanos poseemos la tendencia al pecado, realizamos aquello que nos hace sentir orgullo, en ocasiones, para lograr nuestros objetivos somos capaces de herir a al prójimo y nos deleitamos en decir que somos fuertes, ya que obtenemos lo que deseamos.

Sin embargo nuestra grandeza no se mide por lo que somos, poseemos o llegamos a hacer, la verdadera grandeza esta en dominar nuestros sentimientos, pensamientos, el impulso natural de pisotear a los demás para lograr un objetivo. La grandeza esta en el dominar al pecador que llevamos dentro, dejar que mengüemos para que el carácter de Dios nos transforme.

“Los que tienen verdadera fe en Cristo serán serios, recordando que le ojo de Dios los ve, que el juez de todos los hombres pesa el valor moral, que los seres celestiales observan que clase de carácter están desarrollando”.
No olvidemos que Dios ve todo lo que se realiza en esta tierra y nos examina por individual y los Ángeles son testigos de tales cosas.

De las gemas anteriores, como profesionales también pueden llegar a ser difíciles de practicarlas, puesto que nadie está exento de dichas situaciones, por ende todos debemos tomarnos de la mano creadora, no deberíamos desviar nuestra vista del gran maestro, día a día es una oportunidad para crear un carácter por el cual seamos dignos de ser llamados hijos de Dios y dejar que el guie nuestros pasos.



ANOTACION__________________________________________

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